Llegó la navidad y su mac combo de árboles, botas, regalos, cenas, luces y el famoso "Espíritu navideño" que por lejos se transforma en la mejor estrategia publicitaria, el mejor slogan y por si fuera poco poseen de Imagen corporativa al Viejo Pascuero, que matiza el doble discurso. Porque hay que decir que el viejo pascuero, genera jugosos dividendos, con el famoso jo, jo, jo, se gana la simpatía de muchos y con certeza roba las sonrisas de los niños: más el dinero de sus padres, también explota a los trabajadores con horarios de trabajo abusivos, genera numerosas deudas, sube los precios, suben los pasajes de los buses en un 100% en la mayoría de los casos y por último genera tristeza en aquellos padres que no podrán darle el regalo que quisieran a sus hijos, y a estos hijos le rompe sus ilusiones navideñas. Ahí está la navidad que no se cuenta, esta es la navidad que se paga...
Si San Nicolás de Bari, sacerdote cristiano, quien inspiró la creación del Pascuero hubiese sabido que dando obsequios a los niños pobres de su época, iba a dar pie al personaje más solicitado para las navidades, hubiera de plano inscrito la marca Viejo Pascuero S.A. y hoy con tales fondos que recaudaría yo pienso que ya no haría regalos, crearía una casa de acogida para aquellos niños que viven en las calles, les daría educación y les daría una familia, entre otras cuantas cosas más. Ese hubiese sido un gran negocio. Pero no fue así, Sucedió totalmente al revés, este negocio lo descubrieron otros y el dinero, genera más dinero, a su vez este avaricia y por último la soledad del corazón.
Sin embargo no hemos hablado de quien Podría salvar a estos últimos, de quien es la estrella de la navidad, el pequeño Jesús, que humilde nació en un pesebre rodeado de sus más cercanos, José, María, un par de animales, pastores y tres extraños. Quien marco la historia, dejando un legado de amor y libertad, quien revolucionó la época y la historia, con sus palabras, sus profecías, sus milagros, con su esperanza, entrega y voluntad.
Es cierto ha pasado el tiempo, Jesús ayer luchó por lo pobres, por quienes no tenían nada, acogió a quienes caminaban sin rumbo, defendió lo indefendible, triunfando con la verdad, perdonó... Y hoy??? hoy estás tú para hacerlo, es cierto puede que no creas en Dios, no creas en la religiones, es totalmente válido, pero no me digas que no crees en nada, por que no te lo voy a creer, siempre existe algo en lo que uno cree, algo que es superior a nosotros, cada uno le da el nombre que estime, unos dirán mesa, otros dirán destino, para mí es Cristo. Sin embargo lo que no cambia es la desigualdad, la pobreza, las injusticias, aquéllas que ocurrían antes, ocurren mil veces más hoy y necesitamos de tí , de tus convicciones.
La navidad ya llegó, pero ¿qué navidad?, seguro que aquella que no abraza a quien vive en la calle, a quien la noche del 24 no cenó, no se abrigó, a quien nadie le dijo ¡¡¡ Feliz Navidad¡¡¡ , sin embargo lo recibió quien no le ha fallado durante mucho tiempo, la fría noche y aquella amiga que muchos le temen, la soledad, pero que finalmente ha sido la única que jamás le ha dejado plantado .No se les pide dejar a sus familias el 24 de diciembre porque sabemos lo que significa para cada uno de ustedes , pero hay 364 días más.
"Hasta que uno no sienta la verdadera alegría de Navidad, no existe. Todo lo demás es apariencia - muchos adornos. Porque no son los adornos, no es la nieve. No es el árbol, ni la chimenea. La Navidad es el calor que vuelve al corazón de las personas, la generosidad de compartirla con otros y la esperanza de seguir adelante."
Edgard Tapia, 24 de diciembre 2006
